El 19 de febrero de 1997, en calle Mendoza, entre 6 y 7, en el departamento Pocito, un niño de 12 años murió al ser embestido por un auto. Se trató de “Paquito” Ruiz Chumbita, quien es recordado por su familia como un niño inteligente, muy alegre, y que amaba el karate y la natación. Este último fin de semana, la Fundación Familias del Dolor y la Esperanza lo homenajeó en el lugar donde falleció con un cartel con su nombre y un ángel.
Según relató Sandra Chumbita, la mamá de “Paquito”, a Diario la Provincia SJ, “recuerdo que a mi hijo le habíamos comprado una bicicleta cromada y salió a andar para ir a ver a un amiguito. Me dijo ‘ya vengo mamá’. Pero vino este señor y lo atropelló por adelantar a una camioneta sin luz. Lo agarró a mi hijo de frente y lo levantó. Lo llevó al hospital pero el chiquito ya iba fallecido”.
Hoy, Francisco “Paquito” Antonio Ruiz Chumbita tendría 37 años de edad. Él tenía otros 2 hermanos, Pablo, que vive en Irlanda, y Rocío, que vive en San Juan. Su madre, Sandra, agregó: “Me quedaron muchas cosas hermosas que él tenía. Recuerdo muchísimo a mi hijo. Le gustaba el deporte y la natación. Él estaba en karate con Jorge Videla y tenía de todo un poquito, era muy inteligente. Esa bicicleta se la regalamos porque pasó de grado. Estaba en quinto grado y se la regalamos. Toda la vida me arrepiento pero dicen que los destinos están escrito y se llevan las mejores flores del jardín”.
“Hay que llevarlo, yo ya lo tengo asumido y se que hay muchos papas que no lo pueden asumir. Hay muchos casos que quedaron impune. En mi caso, salió el juicio pero no le quitaron el carnet ni fue preso”, recordó lamentándose.
“He cumplido una misión, es una concientización para que señores que se llevaron una vida como la de mi hijo, tanta almas, sepan lo que hicieron, que se concienticen que el volante y la velocidad mata. Hay que tener cuidado. No es sólo tomar un vehículo y salir a la calle. Hay que tener un respeto por los demás”, agregó, y luego sentenció: “Era algo que tenía que hacer, por lo menos que quede ahí que está su alma y corazón”.