Mientras disfrutaban de la doble victoria al hilo en la 37º Vuelta Internacional a San Juan y el liderazgo en la clasificación general, el equipo europeo Quick Step fue protagonista de un verdadero escándalo. El club organizador, el Pedal Club Olimpia, decidió expulsar de la competencia al belga Iljo Keisse tras las acusaciones de acoso sexual de una moza sanjuanina. Según el comunicado, el deportista tuvo un "comportamiento que atenta al honor y la reputación del evento, la UCI y el ciclismo en general".
La polémica estalló este lunes, cuando una joven que trabaja en un bar denunció en la policía al famoso pedalero. Según el relato de la mujer, cuando ella pidió sacarse una foto con la reconocida escuadra, entre ellos el argentino Maxi Richeze, el ciclista belga simuló un acto sexual y la rozó intencionalmente con sus genitales. En la imagen que ofreció como prueba se observa cómo Keisse apoya una mano en la nunca y acerca su entrepierna a la trabajadora.
Tras desatarse el escándalo, el Juzgado de Faltas de San Juan y tal cual marca la Ley provincial multó al deportista a pagar 3 mil pesos y a pedirle disculpas a la denunciante. Este mismo martes, el pedalero brindó una conferencia para pedir perdón y explicar cómo se dieron los hechos. "Hice un estúpido gesto con mi mano del que me arrepiento, pero quiero dejar bien claro que no la toqué ni con mi mano ni con la rodilla", aseguró.
Sin embargo desde la organización de la Vuelta a San Juan, en conjunto con el Gobierno provincial, decidieron sancionar duramente al atleta apelando al reglamento de la Unión Ciclista Internacional. El mismo dice que todo "licenciado deberá tener en todo momento una presentación ejemplar y comportarse convenientemente en todas las circunstancias, incluso fuera de las pruebas".