El próximo mes en el Servicio Penitenciario de San Juan se estrenarán tres pabellones con capacidad para 210 presos. Además sumarán cámaras de seguridad, porque actualmente hay sólo dos, y se incrementará el número de scanners para controlar a las visitas que ingresan al edificio. Así lo aseguró el ministro de Gobierno, Emilio Baistrocchi, a Tiempo de San Juan.
La primera inauguración impactará en los 1.550 internos que actualmente hay en el Penal de Chimbas. Se trata de las nuevas plazas que se sumarán a las 130 que vienen de la mano del programa "Casas por Cárcel", destinadas a los detenidos con buena conducta. Esta mejoras aumentarán la capacidad del Servicio Penitenciario, que pasará a tener lugar para 1.000 internos (hoy hay sólo para 750 personas, pese a que se multiplica la cifra de aprehendidos).
Otra de las obras que se realizarán con fondos provinciales será la instalación de tecnología de punta en distintas áreas del Penal. Se pondrán 50 cámaras de seguridad y sumarán nuevos scanners para monitorear a los internos y las visitas que intentan ingresar al edificio con estupefacientes.
También se está realizando una ampliación en el área de requisas y la licitación del cierre perimetral. "Hoy no existe. El campo del Penal no está perimetrado, de hecho se sufrieron varias usurpaciones. Estamos trabajando para regularizar toda esta situación", explicó Baistrocchi.