Walter Bustos (40) cumplía tares en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Angaco cuando salió a la luz la denuncia por un presunto abuso sexual y fue separado del Arzobispado de San Juan. Pero arrancó su carrera en 2007, en Santa Lucía, y desde entonces fue recorriendo diferentes iglesias sanjuaninas, ganándose el respeto y, sobre todo, el cariño de todos los fieles. Según el perfil que publicó el diario Tiempo de San Juan, el ambiente juvenil de los circulistas lo apodó "El Padre de los jóvenes".
El sacerdote de 40 años se ordenó en 2007 en la parroquia de Santa Lucía. Después de dos años pasó a una Iglesia de Chimbas, hasta que fue trasladado al interior de la provincia para hacer su trabajo pastoral: Calingasta, donde estuvo tres años. Desde hace un tiempo cumplía funciones como vicario en la parroquia de Angaco y tenía como próximos destino el departamento San Martín y después el Colegio Luján.
Hoy el sacerdote está acusado de abusar sexualmente de un sobrino, hoy de 14 años, desde que tenía 9. Desde el Arzobispado emitieron un comunicado, donde expresaron que decidieron separarlo de su cargo hasta que se esclarezcan los presuntos episodios denunciados.
Mientras tanto son muchos los colegas que se manifestaron al respecto, incluso pidiendo oraciones para el Padre Walter. "A esto-por la denuncia-hay que hacerle frente y la mejor forma es rezando", comentó el Padre Alejandro, Asesor del Movimiento Círculo de Juventud. Otros sacerdotes, en diálogo con el diario digital, se mostraron sorprendidos ante la noticia y llenaron de elogios al acusado. "El que lo conoce lo quiere. Es inimaginable que haya podido hacer algo así", comentó un amigo cerano.