El juez Juan Carlos Peluc Noguera (Sala II, Cámara Penal) condenó a 10 años de prisión a un changarín de 35 años. El individuo corrompió sexualmente a la hija de su expareja desde los 12 a los 13 años. La niña, producto de ese ultraje, quedó embarazada.
El hecho sucedió en 2016, cuando la víctima llegó al Hospital Rawson de San Juan con diarreas y vómitos. Lo que al principio era una "hernia" terminó resultando un embarazo de 22 semanas. Fue entonces cuando la menor confesó que la pareja de su madre, a quien le decía papá, había abusado de ella en varias oportunidades.
La niña dejó shockeados a los psicólogos con su relato. Contó que el sujeto la buscaba a la salida de la escuela y que la amenazaba con matarse si todo salía a la luz. Ahora es madre de un bebé de un año.
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