Una familia de 25 de Mayo, una localidad rural de San Juan, está pasando por su peor momento porque no tienen donde vivir. Mientras las temperaturas en la provincia siguen descendiendo, los Ochoa pelean por quedarse en su vivienda, una humilde construcció que se les cae en la cabeza. Así lo aseguró Diario Huarpe, el medio que contó la historia de lucha de la familia sanjuanina.
Los Ochoa viven en la zona de la Chimbera, un vecindario precario y con muchas necesidades. La casa donde viven ahora es de adobe y ellos la habitan desde hace 8 años, cuando nació Alexis, su primer hijo. Luego, nacieron dos niños más, Milagros de 5 años y Estefanía, de 3 años. El matrimonio está compuesto por Gloria Morán y Roberto Ochoa, que son quienes llevan adelante la lucha por conservar su hogar.
Según publicó el diario local, todo iba normal hasta hace una semana, cuando las paredes y el techo colapsaron por la humedad. "Desde la semana pasada se está cayendo su casa y tienen chicos muy pequeñitos. Están pasando mucho frío", aseguró al medio sanjuanino, Silvia Tapia, abuela de los niños. La mujer también relató que, desde la Municipalidad de 25 de Mayo, les llevaron nylon para la vivienda pero nada de materiales para volver a levantarla y que sea un lugar seguro.
La casita de los Ochoa es una sola pieza, donde todos duermen y no tiene divisiones en su interior. Los cinco integrantes de la familia duermen en una cama grande de una plaza y media y otra de una plaza. "Las juntan para poder dormir", comentó Silvia. Los Ochoa viven del trabajo del padre en una finca y es ese su único sustento. Ahora piden ayuda para poder arreglar la vivienda porque no quieren irse del lugar, pero su vida corre peligro con la construcción que cede a cada minuto.