La importancia de la salud bucal en el embarazo: mitos y verdades

En un esfuerzo continuo por garantizar la salud integral de las embarazadas, el Ministerio de Salud, bajo la dirección del doctor Luis Medina Ruiz, ha puesto el foco en la importancia de la odontología como un pilar fundamental del cuidado prenatal. A través de un enfoque integral, se busca promover los controles odontológicos desde el primer trimestre para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida de las gestantes.

La doctora Analía Chauich, jefa del servicio de Odontología del Instituto de Maternidad, destacó la relevancia de esta atención desde el inicio del embarazo: “Lo ideal es que, en la primera consulta prenatal, el obstetra remita a la paciente a odontología. De esta forma, podemos detectar problemas como caries o enfermedades de las encías, que si no son tratados a tiempo, pueden derivar en complicaciones serias durante el embarazo, como infecciones urinarias recurrentes o incluso un aborto espontáneo en los casos más graves”, señaló la especialista.

Derribando mitos: los tratamientos dentales sí están permitidos

Uno de los principales obstáculos en la salud bucal de las embarazadas es la desinformación. La doctora Chauich desmintió la creencia de que los tratamientos odontológicos están contraindicados durante la gestación, afirmando que “Este es un mito. A lo largo del embarazo se pueden realizar todos los tratamientos necesarios, siempre bajo el cuidado de los profesionales y con los medicamentos adecuados. Incluso es posible hacer extracciones o rehabilitación completa, como la colocación de prótesis, si la paciente lo requiere. Esto no solo tiene una función estética, sino también funcional y social, ayudando a que la paciente recupere su autoestima y bienestar”.

Si bien el primer trimestre es la etapa más recomendable para iniciar los controles, la doctora asegura que nunca es tarde para recibir atención odontológica: “Si bien el primer trimestre es lo más adecuado, los tratamientos se pueden hacer durante cualquier etapa del embarazo, incluso en los últimos meses. Lo importante es que el cuidado sea constante y adecuado a las necesidades de cada paciente. En los casos de embarazos de alto riesgo, como aquellos con hipertensión o diabetes, el trabajo en conjunto con otros profesionales es fundamental”, agregó.

El embarazo no descalcifica los dientes

Otro mito extendido es la idea de que el embarazo provoca la pérdida de dientes debido a una supuesta descalcificación. La doctora aclaró que esto no es cierto: “Es un error pensar que el embarazo causa la pérdida de dientes. El único caso en el que esto podría ocurrir es en pacientes con problemas de salud preexistentes, como artritis o malnutrición. Lo que realmente sucede es que el embarazo puede generar cambios en la acidez bucal, por lo que es fundamental realizar un buen control y prevención desde el principio, como la correcta técnica de cepillado y la aplicación de flúor, para evitar la aparición de caries”, destacó la galena.

Horarios de atención y organización del servicio odontológico

El Instituto de Maternidad ha dispuesto un esquema de atención odontológica de lunes a viernes en dos turnos: de 7 a 13 horas y de 13 a 19 horas. La doctora Chauich subrayó la importancia de una primera consulta para evaluar cada caso, explicando que, “A pesar de ser la jefa del servicio, me encargo personalmente de las primeras consultas. A partir de ahí, derivamos a los pacientes a las especialidades necesarias según cada caso. Todos los odontólogos de la institución estamos capacitados para brindar atención integral”.

Un compromiso con la salud materna

Este enfoque integral en la atención odontológica de las embarazadas es una muestra del compromiso del Ministerio de Salud con la salud materna. Bajo la dirección del ministro Medina Ruiz, la institución continúa impulsando políticas públicas que garantizan el bienestar de la mujer en todas las etapas de su vida. El trabajo del equipo odontológico del Instituto de Maternidad no solo previene complicaciones durante la gestación, sino que también asegura que cada paciente reciba el tratamiento adecuado para mantener su salud bucal en óptimas condiciones, contribuyendo así a una maternidad más segura y sin riesgos innecesarios.