Verdaderos héroes que supieron actuar en el momento justo y lograron salvar una vida. Se trata de dos guardias de seguridad del barrio Praderas, en la capital salteña, que rescataron a un niño que se había ahogado en una pileta.
El episodio con final feliz sucedió días atrás. Los guardias, Martín y Darío, cumplían sus funciones de seguridad dentro del barrio cuando vieron al papá del niño salir desesperado de una casa con su hijo de un año y medio en brazos. El niño había caído dentro de la pileta en la casa familiar y lo sacaron inconsciente. Los agentes lo ayudaron de inmediato. Mientras uno le practicaba las maniobras de reanimación, el otro llamaba al 911. En una cuestión de segundos lograron que reaccione y salvarle la vida.
En un acto de agradecimiento, los padres del menor y los vecinos de Praderas les realizaron un especial homenaje este viernes al mediodía en el barrio. La gente de la zona destacó que los guardias habían sido capacitatos para actuar en este tipo de situaciones, y que eso fue clave para que pudieran rescatar al pequeño.