Llevan a juicio a una peligrosa banda de sicarios de Orán

El ideólogo de la organización operaba desde la cárcel. Mataron a un hombre y dejaron gravamente herido a otro. 

Llevan a juicio a una peligrosa banda de sicarios de Orán
Imagen ilustrativa (Web)

Una peligrosa banda de sicarios de Orán irá a juicio por un crimen y la tentativa de otro. El líder de la organización operaba desde la cárcel. Los hechos vinculados al narcotráfico, ocurrieron en Orán en menos de una semana en mayo de 2017.

El principal acusado es Raúl Ricardo "Coya" Rojas, quien desde la cárcel encargó dos crímenes. Como ejecutores, aparecen Norberto Mendoza y José Castillo, mientras que Enzo Quiroga, Matías Sarmiento, Daniel Liborio y Alejandra Núñez completan la grilla de criminales.

El primero fue un intento frustado ya que la víctima, Ricardo Gerónimo, logró sobrevivir aunque recibió seis disparos. Fue atacado el 1 de mayo de 2017 cuando regresaba a su casa en Orán. Con la ayuda de su familia llegó al hospital de la zona y logró salvar su vida. Los médicos contaron que mientras Gerónimo estuvo internado muchas personas (la mayoría desconocidos del hombre) llamaron al nosocomio para conocer su estado de salud.

Cinco días después del ataque a Gerónimo, encontraron el cuerpo de Martínez con heridas en el cuello y torso, también en Orán. El hombre fue asesinado delante de su esposa y sus hijas mientras esperaba para comprar comida. Un hombre bajó de una camioneta que se estacionó de golpe en el lugar y le disparó.

Los cargos ​

Por los hechos investigados, Rojas, Mendoza y Castillo deberá responder por los delitos de homicidio y tentativa de homicidio, en ambos casos doblemente agravado por haber sido cometido bajo "promesa remuneratoria, por el número de participantes y por la utilización de arma de fuego" en calidad de coautores.

Quiroga, Sarmiento y Liborio, por el hecho en perjuicio de Gerónimo, irán a juicio por los delitos de tentativa de homicidio doblemente calificado por promesa remuneratoria y por el número de participantes y agravado por la utilización de arma de fuego en grado de partícipes necesarios.

Por el crimen de Martínez, Núñez carga con la acusación del delito de "partícipe necesario del delito de homicidio doblemente calificado por promesa remuneratoria y por el uso de arma de fuego". En todos los casos, la escala máxima prevé para todos los acusados la pena de prisión perpetua.