Con la vuelta de Salta a la fase 1 y el cierre de comercios, gimnasios, entre otros rubros, desde el sector aseguran que la situación es insostenible y que de no haber un cambio urgente serán muchos más los que se vean obligados a cerrar sus puertas, viéndose privados de esta manera de su única fuente de ingresos y dejando a cientos de empleados en la calle.
Entre lágrimas, comerciantes que abrieron sus puertas hace más de 25 años, y que resistieron los numerosos cachetazos propinados por los vaivenes de la economía argentina, sostienen que jamás han vivido una situación de tanta impotencia e imploran al gobernador, Gustavo Sáenz, el retorno de la actividad privada. Y aseguran que la asistencia que el Gobierno prometió a los sectores más necesitados es insuficiente.
Por este motivo una mayoría del sector privado se nucleó para exigir al Gobierno la vuelta al trabajo. Con la consigna "Exigimos trabajar todos", lanzaron una convocatoria de movilización para este sábado 3 de octubre. La cita será a las 16 horas en el monumento a Güemes, en vehículo y tomando las precauciones sanitarias correspondientes, desde donde partirán en caravana hasta la Casa de Gobierno en barrio Grand Bourg.
Parte del pedido es que este retorno a la actividad sea total, sin restricciones horarias ni de terminación de DNI.
