Mientras los casos de coronavirus aumentan y la gente vive en alerta, con miedo e incertidumbre, actuales y ex funcionarios del Gobierno se pelean y se echan culpas en las redes sociales.
Tras la polémica generada el fin de semana pasado cuando se difundió una nota firmada por el director de HemoSalta, Martín de la Arena, donde decía que el paciente con COVID debía pagar 30.000 para recibir plasma, la exministra de Salud, Josefina Medrano publicó un mensaje en Twitter, que hace alusión a una entrevista en la que la directora del Centro Regional de Hemoterapia, Betina Saracino, explica que falta una resolución del Ministerio de Salud para aprobar el costo que debería tener el plasma para los centros transfusionales de sangre privados y públicos.
"Te recuerdo que durante tu gestión, hice la consulta pertinente a tus asesores legales si esa práctica debía ser arancelada dado que es un tratamiento experimental, y ellos solicitaron el estudio de costos como cualquier otro producto", respondió Saracino.