Detuvieron e imputaron a un hombre de 26 años por incumplir la prohibición de acercamiento a su expareja y también el aislamiento obligatorio por la pandemia de coronavirus.
El hecho ocurrió en el barrio Morosini de la Capital salteña. La pareja tiene dos hijos en común y estaban separados. El 30 de marzo, él imputado entró a la casa y discutieron. Como se puso violento, la mujer llamó al Sistema de Emergencia 911 y solicitó que se le impongan medidas de prohibición de acercamiento para que se abstenga de ejercer actos de violencia física y psíquica.
Pese a la prohibición de acercamiento a 300 metros impuesto por el Juzgado de Violencia Familiar y de Género 4, el hombre volvió a la vivienda y fue sorprendido por la consigna policial que la custodiaba. Quedó detenido y fue imputado por el fiscal penal Gabriel González.