En un sector del Parque Nacional los Cardones crece una planta autóctona que cubre la zona de un vivo color amarillo: el amancay (Hieronymiella aurea). Se mantiene invisible la mayor parte del año, como una adaptación evolutiva a la sequedad.
En contraste con la tierra seca de la región, las flores de hojas verdes y flores amarillas empiezan a aparecer tras las lluvias de diciembre.
En la Recta de Tin Tín, sobre la ruta 33 predominan los cardones tras los cuales se nombró al Parque, pero llegando a fin de año se pueden apreciar estas delicadas flores.
Esta flor de rico perfume sólo puede encontrarse en ésta zona: se trata de una planta endémica, por lo que es celosamente cuidada por el Parque. En el lugar se encuentran carteles que prohíben que se corten, pero se invita a las personas a visitar y sacar hermosas fotos del paisaje.
En estos días se podrá disfrutar de este paisaje único, en viaje a Payogasta o Cachi.