Un intento de robo en la zona cercana a la Sala Lavardén del centro rosarino terminó con un momento insólito cuando la policía requisó al delincuente: le encontraron un consolador.
Un hombre denunció a la policía que otro estaba sustrayendo elementos de su utilitario. Ya se había llevado una bicicleta y pretendía seguir robando cuando llegaron efectivos de la Brigada Motorizada a Mendoza y Sarmiento.
El acusado no se dio a la fuga, sino que fue atrapado rápidamente en el lugar, y alegó que en realidad se había confundido el vehículo con el de un amigo y pretendía hacer una broma.
Nadie le creyó, y por eso lo revisaron. Grande fue la sorpresa cuando en la mochila que llevaba fue hallado un consolador. El sujeto, de 32 años, quedó detenido.