Pasado más de un año desde que lo detuvieron en Uruguay, Sebastián Romero aún cumple una orden de prisión domiciliaria. El militante conocido como el “Gordo del Mortero” tras las protestas en el Congreso a fines de 2019 se inscribió como precandidato nacional en Santa Fe para las elecciones.
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El dirigente del Partido Socialista de los Trabajadores Unificado (PSTU) integra una de las dos listas del Frente de Izquierda y de Trabajadores Unidos (FITU). De cara a las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), se anotó como segundo senador suplente en la provincia.
“Es una batalla más que tenemos que dar los trabajadores”, afirmó Romero la semana anterior sobre su postulación a pesar de estar privado de su libertad. A continuación, remarcó: “Hoy soy el único candidato preso político en la Argentina, pero no soy el único preso político”.
Desde mediados de 2020, el exdelegado de la planta de General Motors (GM) en Alvear es protagonista de una campaña de diferentes organizaciones políticas que reclaman su liberación. En la causa que se abrió tras la marcha contra la reforma previsional lo procesaron por intimidación pública, daños y resistencia a la autoridad.
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Rumbo a las PASO, el militante figura en la boleta de la lista “Unidad de la Izquierda”, que tiene como titulares a Irene Gamboa y Luciano Cáceres. Para participar en las elecciones generales, el FITU deberá obtener el 1,5% de los votos válidos en Santa Fe.
Romero fue detenido en Uruguay en mayo del año pasado y luego extraditado. Después de algunos meses bajo prisión preventiva efectiva, el juez federal Sebastián Casanello accedió a que cumpla arresto domiciliario durante el proceso.
