La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) desbarató una granja de criptomonedas que operaba en un domicilio en Rosario y no había sido declarada ante las autoridades. El operativo se llevó a cabo tras registrar que el lugar tenía una demanda de electricidad superior al millón de pesos que el contribuyente no podía justificar como parte de su actividad económica.
¿Cómo descubrió la AFIP que había una granja de criptomonedas sin declarar?
Los inspectores de AFIP llegaron al domicilio en el marco de una serie de acciones en granjas de criptomonedas en toda la provincia de Santa Fe, donde a través de la Dirección General Impositiva se llevó adelante la tarea de fiscalizar la correcta declaración de compras y ventas de equipos, el origen de los fondos para la adquisición de estos y los ingresos derivados del servicio de mantenimiento y reparación de maquinaria.
Allí constataron que en uno de los ambientes de la casa había un total de 9 “rigs” de minería con 66 placas de video, por un valor de alrededor de 70.000 dólares sin documentación que pudiera respaldar la adquisición de los equipos. Además, se identificó un consumo inusual de luz que correspondería al que demandan los equipos para “minar”.
La actividad que el contribuyente declaró consistía en la venta de procesadores y placas de video necesarios para el proceso de minado de criptomonedas, así como la prestación del servicio de mantenimiento y reparación de ese tipo de equipos, sin que se pudiera constatar que contara con el permiso para realizar actividad de minería de activos digitales.