Por segunda vez en menos de tres años, la Justicia provincial dictó este miércoles una condena por contaminación del arroyo Saladillo en el extremo sur de Rosario. El fallo identifica a seis empresas de Villa Gobernador Gálvez como responsables del deterioro y les ordena una serie de medidas para reparar el daño ambiental.
La resolución de primera instancia no sólo establece que las compañías deben limpiar la zona afectada. También impone cambios en los procesos de gestión de efluentes de cada planta para prevenir que la situación se repita.
¿Cuáles son las empresas que contaminaron el arroyo Saladillo?
La jueza civil y comercial Verónica Gotlieb condenó a Total Química SA, Euro SA, Reciclarte SRL, Subproductos Ganaderos Rosario SA, Shorton SA y Mattievich SA. Todas las empresas denunciadas por contaminación operan a la vera de uno de los afluentes del río Paraná.
De acuerdo al fallo, las compañías deben financiar el saneamiento del arroyo. Por la misma vía se establece un cronograma de tareas que incluyen la participación de la Municipalidad de Villa Gobernador Gálvez y el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de Santa Fe.
La investigación del Juzgado Civil y Comercial 13 de Rosario puso la lupa en el área delimitada por el Saladillo, las avenidas Circunvalación y San Martín de la localidad vecina a Rosario. Se trata de un sector en el que conviven fábricas, frigoríficos y plantas químicas.
La contaminación tuvo un impacto directo en la reserva hídrica natural del arroyo. El predio de uso público también cuenta con un camping y canchas de fútbol.
La sentencia de Gotlieb responde a la denuncia que hizo su colega Luciano Juárez. El 13 de julio de 2020, el juez advirtió que el agua tenía una “espuma blanca” en el área antes mencionada.
A partir de la intervención de la fiscal extrapenal María Laura Martínez, la magistrada determinó que el daño ambiental colectivo es producto de los desechos de las empresas villagalvenses. Por su parte, la Municipalidad ya había presentado un informe sobre el “valor elevado de bacterias coliformes”. Esto representa un “exceso de materia orgánica” y “un riesgo para la salud” de quienes pescan, nadan o pasan cerca del Saladillo.