La fuerte tormenta que vivió Rosario este viernes dejó como saldo una importante cantidad de árboles caídos, zonas anegadas y muchos destrozos materiales.
En zona sur, un árbol de grandes dimensiones cayó en Ovidio Lagos y Rueda y arrastró consigo muchos cables, dejando al área sin energía eléctrica. Cerca de allí, en Amenábar al 2600, las bocas de tormenta tapadas de basura impidieron que escurra el agua y se hizo imposible transitar.
Algo parecido ocurrió en pleno centro, en Entre Ríos y 3 de Febrero. Los vecinos se quejan que la Municipalidad nunca se toma la molestia de destaparlas y el tránsito en la zona cuando llueve se vuelve imposible.
Otro árbol provocó serios destrozos en Dorrego y Montevideo, y hasta horas de la tarde una cuadrilla de la EPE trabaja en reponer el servicio. Además, personal de Defensa Civil debió intervenir en varios sectores por la voladura de techos y destrozos en vehículos. En Villa Gobernador Gálvez, el agua casi destroza varias embarcaciones.