Lionel Messi alcanzó este lunes el récord de haber jugado 768 partidos con el Barcelona, convirtiéndose en el futbolista que más veces se puso la casa azulgrana. La Pulga fue homenajeada antes del inicio del encuentro ante Valladaolid, pero quien opacó su presencia fue nada más y nada menos que su esposa, Antonela Roccuzzo.
La rosarina ingresó al campo de juego luciendo su espectacular figura, que lució todavía más con su jean apretado negro, jersey a tono, cartera rosa y la sonrisa de siempre. La morocha se llevó la mayoría de los flahes, al igual que los tres hijos del crack que también estuvieron presentes: Mateo, Thiago y Ciro.
“Antonela Roccuzzo, ella es el mejor gol de Messi”, destacó el medio El Intra Sport. “La argentina se ha convertido, sin quererlo, en la protagonista de la celebración. Y es que lucía igual o más espectacular que siempre”, escribieron en Mundo Deportivo.
Messi recibió una réplica de la camiseta con la que debutó en el Barcelona, enmarcada y autografiada por sus entonces compañeros del club catalán.