La jueza Sylvia Aramberri, titular del Juzgado Federal Nº 2 de Rosario, hizo lugar a una acción de amparo ambiental y ordenó al Senasa realizar controles a las frutas, verduras y hortalizas que se comercializan en la ciudad.
La decisión de la magistrada llegó luego de que se determinara la existencia de residuos de plaguicidas en las muestras tomadas en el Mercado de Concentración de Fisherton y del Mercado de Productores de Rosario. Los análisis arrojaron la presencia de contaminantes por encima de los límites de tolerancia en pepinos, berenjenas, zanahorias, apio fresco, lechuga, manzanas, rúcula, y espinaca.
Además, se reprochó "la conducta omisiva del Senasa" debido a la poca fiscalización: en 2016 se efectuaron inspecciones en la circunscripción territorial de la ciudad de Rosario para detectar residuos agroquímicos solamente en octubre y noviembre y sobre seis muestras de vegetales.
Por este motivo se ordenó la realización de al menos seis controles y veinticuatro monitoreos anuales en las frutas, verduras y hortalizas que realizan tráfico federal y que se comercializan en el Mercado de Concentración de Fisherton y del Mercado de Productores de Rosario.Asimismo, se exigió al organismo que dé publicidad de los resultados.