El rubro de ceramistas de Santa Fe está sumamente complicado por la caída de las ventas, el parate de la obra pública y la apertura de importaciones. Hay suspensiones en la mitad de los trabajadores del sector.
"La rama blanca, pisos y revestimientos están paradas desde hace rato, por el freno de la construcción, mientras que las fábricas de ladrillos están sintiendo el impacto del parate en la obra pública y también privada", dijo Juan Domingo Moreyra, secretario adjunto del Sindicato Obrero de Cerámica, Porcelana y Azulejo (Socpa).
En Santa Fe el sector emplea a unas 400 personas, y estiman que cerca de la mitad está con problemas de empleo o directamente con suspensiones. "Ninguna fábrica hoy está con el programa Repro, que si bien no es la solución, solía ayudar en estos casos", señaló y agregó que las pymes ya no saben qué hacer para no despedir personal.