Después de una noche agitada en inmediaciones de Avenida Pellegrini por los procedimientos para esclarecer los ataques contra dos casas en las que supo vivir el juez Ismael Manfrín, los investigadores deslizaron como hipótesis inicial que ambos episodios fueron cometidos por autores diferentes.
La descripción física de los atacantes vistos en Italia al 2100 y en Montevideo al 1000 y los elementos secuestrados sugieren que tampoco emplearon las mismas armas, de acuerdo a los datos preliminares que dio a conocer este miércoles el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Más allá de que se hablaba de una decena de detonaciones escuchadas por los ocupantes de la vivienda ubicada frente a la Comisaría 5°, los investigadores corroboraron que hubo cuatro impactos de bala en lugar. Dos proyectiles se estrellaron contra la pared de la fachada, mientras que otros tantos atravesaron los cristales del frente mientras la familia cenaba.
Ante la consulta de la policía, los vecinos ratificaron que la motocicleta que pasó por el lugar iba a baja velocidad y que uno de los disparos dio contra otra casa vecina. Cuando el patrullero de la seccional salió a perseguir a los sujetos que iban a bordo, el rodado huyó en contramano por Cerrito y despistó a los uniformados a unas diez cuadras de allí.
Tras inspeccionar la zona en el barrio del Abasto, el gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones (PDI) secuestró 6 vainas calibre 9 milímetros y 3 balas de plomo deformadas. En el interior del domicilio también había restos de plomo incrustados en los muebles detrás de las ventanas dañadas.
Voceros judiciales indicaron que el segundo ataque ocurrió alrededor de las 21.40 más cerca del microcentro de la ciudad. Allí recolectaron cinco vainas del mismo calibre junto con un plomo deformado. Si bien el ataque fue dirigido a la entrada del edificio ubicado sobre la vereda par, uno de los disparos dañó un local comercial lindero.
En el marco de la investigación que inició el fiscal de Flagrancia Damián Cimino, desde el MPA anticiparon que la pesquisa se unificará tras la colaboración de Natalia Benvenuto, integrante del área de Delitos Complejos y Económicos. Mientras tanto, las autoridades pidieron un refuerzo en las medidas de seguridad para vigilar ambas zonas junto con otros domicilios en riesgo potencial.