Clínicas, sanatorios y hospitales privados de Rosario manifestaron su preocupación ante la fuerte suba de costos de los insumos médicos, y advierten que la situación se profundizará tras la disparada del dólar.
"La inflación de salud es superior a la del país, y definitivamente la suba del dólar afecta muchísimo a los prestadores", indicó el presidente de la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de Rosario, Rodrigo Sánchez Almeyra.
Esto es porque la mayoría de los insumos utilizados, como medicamentos, descartables, suturas quirúrgicas, guantes, jeringas, camas eléctricas, y los equipos, son importados. Si bien varía en cada institución, el costo de estos elementos suele representar en torno al 30% del costo total, mientras que el recurso humano supone el 60%.
"Estamos extremadamente preocupados por la situación, tanto por la devaluación como por el encarecimiento del crédito bancario, que nos afecta muchísimo a todas las empresas. No esperábamos este vaivén del mercado", manifestó.
Sánchez Almeyra remarcó que el mercado también pone un límite, y es por eso que no se puede trasladar todo el encarecimiento a las cuotas o aranceles "porque la gente no lo va a poder pagar".
"Se está haciendo muy difícil financiar el sistema, tanto para los financiadores como para los prestadores. La inflación impacta dura y directamente, ya que la salud privada no tiene ningún tipo de subsidios; pagamos luz, gas, alimentos de los pacientes, insumos médicos, salarios y equipamiento", cerró.
