Los familiares de Aquiles, el bebé de ocho meses que sufre una enfermedad degenerativa y debe ser tratado con una droga que no está aprobada para su uso oficial en el país, presentaron este lunes una medida cautelar para que se autorice el uso excepcional de la medicación para salvar la vida del menor.
Con una concentración en las escalinatas en Tribunales, Sebastián Donato, el papá del niño, contó además que por estas horas se juntan firmas para entregar un petitorio al Ministerio de Salud de la Nación para que arbitre los medios para que se consiga la vacuna que contrarreste atrofia muscular espinal tipo 1, que padece el pequeño.
La medicación en cuestión es Nusinersen, desarrollada por el laboratorio Biogen y que todavía está en fase de pruebas. "Hace tres meses que Aquiles está internado y no puede esperar más", mencionó en diálogo con la prensa desde el Palacio de Tribunales de Pellegrini y Balcarce.
La familia del bebé viajó hace pocas semanas a Buenos Aires, y mantuvieron reuniones en la filial argentina de la compañía que desarrolla la droga. Del encuentro también participaron funcionarios de la cartera sanitaria nacional y había expectativa en torno a la posibilidad de acceder a la solución. No obstante, los tiempo se dilataron y los padres de Aquiles ahora recurrieron a la Justicia.