La intendenta Mónica Fein y el secretario del Hábitat, Diego Leone, anunciaron una batería de obras para el asentamiento de Cullen y Sorrento en el que viven unas 500 familias.
Los trabajos se llevarán a cabo en dos etapas y demandarán una inversión de más de 100 millones de pesos. En la primera, se realizarán obras en las calles delimitadas por Fresno al norte, Martínez Estrada al sur, Barra al este y Cullen al oeste. Se incluyen aquí la apertura de 12 calles y el entubamiento del zanjón de calle Barra.
En la segunda etapa, en tanto, serán cinco las calles a abrir, en este caso en el sector delimitado por Martínez Estrada al norte, Límite de Expropiación al sur, Barra al este y Cullen al oeste. También se prevé continuar con la construcción de senderos y veredas, cloacas y desagües.
“Los vecinos de este barrio no bajaron los brazos, nos enfrentamos a un privado que quería especular, pero para eso está el Estado, defendiendo a todas las personas, abriendo calles, mejorando las condiciones de vida, y las oportunidades”, precisó Fein frente a un centenar de vecinos.
En el barrio ya se desarrolló el Abre Familia que permitió, en un contacto casa por casa, conocer la realidad de cada una de las familias asentadas en los terrenos, se pavimentaron calles Campbell y Barra, se realizaron senderos, se instaló un transformador de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), y se comenzó colocar alumbrado público.
Además, se transformó un basural de Barra y Cullen en una plaza con juegos para niños y mobiliario urbano, y se realizan semanalmente actividades de encuentro y recreación con las familias del barrio.