Una mujer discapacitada que sufría violencia de género por parte de su pareja desde hace una década, recibió una vivienda para ella y su hija de nueve años, y consiguió que condenaran al agresor.
La víctima de 46 años había realizado la denuncia en la delegación rosarina de la Agencia Territorial de Acceso a la Justicia (Atajo), entidad nacional que trabaja con personas en situación de vulnerabilidad social.
Fue este organismo el que encomendó a la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo, de la Secretaría de Hábitat de Santa Fe, que garantizara el derecho de madre e hija a tener una vivienda digna y de calidad, teniendo en cuenta su condición de vulnerabilidad social.
Cabe resaltar que la mujer padece además una disfuncionalidad psicológica, según lo acredita el Certificado Único de Discapacidad, por el que percibe mensualmente una pensión no contributiva, según consignó el sitio Fiscales.
Por otro lado, la víctima de la violencia machista obtuvo patrocinio del Centro de Asistencia Jurídica (CAJ ) y logró una condena tres años de prisión con ejecución condicional, para su ex pareja por los delitos de lesiones dolosas calificadas, amenazas coactivas y desobediencia de orden judicial.