Si bien la jefa de Policía de Santa Fe, Emilce Chimenti, garantizó el patrullaje en Rosario, los móviles en el interior de la sede de Jefatura de la Unidad Regional II seguían sin poder alcanzar la calle debido a la continuidad del acampe de un grupo de uniformados, en su mayoría retirados, y sus familias.
Pasadas las 13 de este jueves terminó una reunión entre Chimenti y un grupo de representantes de quienes encabezaban la manifestación que no prosperó. "La titular de la fuerza nos informó que se había comunicado con el ministro (Marcelo) Sain a los fines de propiciar una mesa de enlace. Pero al parecer proponen el encuentro para el martes que viene", explicó Nahir Oviedo, una de las abogadas que participó del diálogo con la jefa de Policía.
No obstante, la fecha no cuajó. "Vamos a continuar con la medida hasta tanto no se establezca una fecha más próxima para la mesa de enlace", sumó Oviedo en contacto con Radio 2 para fundamentar la decisión de no terminar con el bloqueo.
Los policías en rebelión reclaman un salario base de 85 mil pesos, suma que fue descartada por Sain, que se refirió a los manifestantes como "cachivaches".
Este miércoles el titular de la cartera de Seguridad anunció la entrega de una suma no remunerativa de 3 mil pesos promedio para los agentes, la actualización del valor de las horas adicionales y la entrega de una tarjeta alimentaria, este otras cuestiones. Dichos beneficios no cuajaron entre quienes encabezan el reclamo salarial.