Efectivos de la Policía Federal y de la Prefectura Naval volvieron a peritar el boliche Sr. Ming de La Fluvial, donde se produjo la desaparición y posterior muerte del joven Carlos Orellano.
Este nuevo peritaje fue ordenado por el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Patricio Saldutti, con el objetivo de verificar si es posible encontrar más restos de sangre y otros líquidos a través del uso de Luminol Bluestar.
Cabe recordar que ya habían sido hallado rastros de sangre en dos zonas del exterior del boliche, uno de los cuales conducía a la barranca donde habría caído o habría sido arrojado Orellano.
Los peritajes en la jornada de este viernes se extendieron por más de seis horas, y fueron realizados bajo la presencia de familiares de la víctima, quienes el jueves se habían manifestado frente a la disco en reclamo de Justicia y luego se habían reunido con el presidente Alberto Fernández.
Este lunes está prevista la realización de la autopsia en el Instituto Médico Legal (IML), la cual se demoró inicialmente porque la familia debía designar a un perito de parte, pero que se terminó adelantando para avanzar con la entrega del cuerpo para que pueda ser velado.
Antes que eso se realizará una tomografía computada en el Hospital Eva Perón, para comprobar las lesiones que sufrió el joven de 23 años.