Todo parece indicar que la firma de cosechadoras Vasalli retomará su actividad con normalidad en enero. Esto es porque está previsto el arribo de un nuevo grupo inversor que mantendría los puestos de trabajo y reactivaría la planta.
Dichos inversores son los empresarios cordobeses Gastón Aguirre, Sergio Barbero y Néstor Girolami, que compraron buena parte de las acciones de la firma, y se sumaron a Mariana Vassalli, nieta del fundador y dueña del 60% de la firma.
En los últimos días, accionistas presentaron ante la Justicia un convenio junto a trabajadores e inversores nacionales y extranjeros. Si se le da el ok a la brevedad, la única industria de cosechadoras íntegramente argentina volvería a funcionar normalmente a partir de enero de 2020.
"Los nuevos inversores se harían cargo de la planta si antes del viernes la Justicia le da el visto bueno al acuerdo presentado entre las partes, después de tres meses de negociación", indicó el abogado de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Pablo Cerra.
"Hoy la situación de los empleados es deplorable, pero lo positivo es que se conservarían los 300 puestos de trabajo y por eso hay mucha ilusión", afirmó el letrado.
