Debido a la bajante del Paraná, que en Rosario registró 1,80 metros de altura, pidieron precaución a los navegantes por la gran presencia de bancos de arena.
Según datos del Instituto Nacional del Agua (INA) la altura media para octubre en la región es de 2,84 metros, pero se informa que la tendencia es que se mantengan los actuales valores en las próximas semanas.
"Entre otras consecuencias, el bajo nivel de las aguas produjo un aumento de la peligrosidad en la navegación por la presencia de bancos de arena", advirtió Edgardo Arrieta, secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento, aunque pidió "no alarmarse".
El sindicalista destacó que esta situación también está generando problemas económicos. "Los pies de muelle no tienen el calada necesaria para hacer la carga total. En el caso de que un barco tenga que quedar parado, tiene que pagar entre 30 y 40 mil dólares", aseguró Arrieta.
Por otro lado, el gremialista culpó al Estado nacional por "cerrar", hace tres años la Dirección Nacional de Construcción Portuaria y Vías Navegables, que tenía datos oficiales sobre la crecida y la bajante del río y "los daños que puede ocasionar. Hoy el país hoy no cuenta ya con esa dependencia", se lamentó Arrieta.