El peón rural de 91 años que fue rescatado este viernes en un campo de Venado Tuerto fue trasladado en forma temporal a un hotel luego que los médicos comprobaran que se encuentra saludable. Funcionarios locales verificaron que tiene familia, pero nadie había ido a visitarlo después de que tomara estado público la aberrante denuncia por trata de personas.
Si bien fue internado inicialmente en el Hospital Gutiérrez, las autoridades aclararon que la medida sólo se tomó por precaución. A la hora de reconstruir la historia de don José en una charla informal, la Municipalidad se enteró de que el hombre que cobraba 200 pesos mensuales por cuidar un campo tiene 17 hijos.
Fuentes consultadas por La Capital indicaron que el anciano nació en Entre Ríos y tres de sus hijos viven en Venado Tuerto. Sin embargo, ninguno se acercó a ver cómo estaba luego del operativo que hizo públicas las pésimas condiciones en las que pasó los últimos 12 años de su vida.
El director municipal de Políticas para Adultos Mayores Franco Balzaretti señaló que los dueños del campo en el que vivía don José son "son personas conocidas de Venado", aunque aclaró que "hay responsabilidades compartidas" en el caso que tiene en sus manos el Juzgado Federal 3 de Rosario.
La investigación impulsó a principios de mes el fiscal Javier Arzubi Calvo surgió a raíz de un llamado anónimo que recibió en febrero la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre). El caso inicialmente fue analizado por el Gobierno de Santa Fe y el ministro de Trabajo Julio Genesini apuntó que la primera inspección realizada entonces arrojó que el peón realizaba "tareas ligadas a la cría ovina y avícola, prestando un servicio de 12 horas diarias".