Marlen Petitti es de Río Segundo, tiene 23 años, y acaba de recibir su título en Medicina: "No recuerdo bien cuando me decidí por esta carrera, pero sentí mucho amor por la profesión después de una internación que tuvo mi hermana Rebeca, donde tuve en contacto con muchos médicos. Desde ahí empecé a considerar la carrera y terminando la secundaria, me decidí", relata.
Durante el cursado, Mar quedó embarazada, debiendo cursar el quinto año con su bebé: "Ese último año me costó mucho más, me sentía mal por dejarlo pero siempre tuve el apoyo de mi familia de mi novio, que me apoyaron un montón cuidándolo para que yo pudiera cursar, estudiar, preparar finales, etcétera", asume.
Con la convicción de haber puesto todo de sí, Mar celebra hoy su título, sabiendo que no fue fácil "pero con esfuerzo todo se logra". Y vaya si esta joven sabe de esfuerzos: toda la carrera la hizo viajando diariamente a la ciudad de Córdoba, lo cual "fue desgastante muchas veces", reconoce, pero sin embargo nada la hizo abandonar el camino emprendido.
La joven de Río Segundo se muestra feliz por todo lo logrado, señalando que la carrera le dejó muchos amigos, y comenta que siempre imaginó recibirse afuera de algún hospital, rodeada de amigos, compañeros y familiares; y fue una sorpresa enorme recibirse de manera virtual.
"Cuando comenzó la cuarentena me quedaban unas pocas materias para rendir, pero estábamos a la expectativa de que reprogramaran las fechas desde la Facultad y nos dieran esta posibilidad de rendir de manera virtual. Me puso muy contenta encontrar la predisposición de profesores a tomarnos de esta manera", comparte agradecida.
Y llegó el gran día. Mar rindió por la mañana frente a una pantalla. Del otro lado, tres profesores evaluaron sus conocimientos: "Fue un lindo examen", remarca.
Mar rindió en su casa, acompañada por su mamá y su bebé. Apenas supo que había aprobado, corrió a contarles: "Fue un momento muy emocionante, después de eso, fuimos a la casa de mis papás a almorzar, junto con mis hermanas y abuela. Algunos amigos cercanos habían hecho carteles y me llenaron de papel picado y harina. Pasé un día hermoso pese a que en la otra punta de Argentina y al mismo tiempo que yo, se recibieron mis amigas de la Facu. Fue un poco triste no compartir ese momento como lo habíamos imaginado, pero a la vez una alegría enorme de saber que pudimos lograrlo juntas".
Así se recibió Marlen y ahora vendrá la Práctica Final Obligatoria y luego la residencia que ya piensa hacerla en Pediatría: "Esta es una profesión para estudiar mucho y toda la vida. Creo que hace falta mucha vocación para entregar la vida a esta carrera, donde los sueldos son muy bajos y los médicos están sufriendo un menosprecio enorme, trabajando muchísimas horas, haciéndose cargo de muchas responsabilidades y en este momento solo se ve la discriminación que viven muchos. Es lamentable que no se nos valore", analizó la joven profesional.
Y agregó: "Pero también esta profesión tiene muchas cosas hermosas y es que se puede ayudar a la gente, y es lo que me gustaría hacer. Espero que este mensaje sirva para que muchos chicos que quieran estudiar Medicina, se animen a hacerlo y no se dejen vencer por los obstáculos, no es fácil pero se puede", enfatizó la Dra Petitti.