El secretario de Finanzas Públicas del Municipio de Río Grande, Diego López, informó que la deuda de coparticipación asciende a los 450 millones de pesos, con un atraso promedio de 35 días. “Ser
deudor regular no te convierte en un mejor deudor”, manifestó.
La deuda de coparticipación que el Gobierno de la Provincia mantiene con el Municipio de Río Grande, en tan solo un año, creció un 125%, al día de la fecha, se adeuda el 60% de enero y el 100% de febrero. Al momento de iniciar la gestión del intendente Martín Pérez, el monto de la misma correspondía a 200 millones de pesos, hoy, es de 450 millones.
Al respecto, el secretario de Finanzas Pública, explicó que: “entre lo que el Gobierno transfirió a la fecha y lo que correspondía transferir, hay una diferencia de 450 millones de pesos. No alcanza con transferir parciales los martes y viernes, sino que necesitamos que nos paguen los 450 millones adeudados”.
El funcionario detalló que 450 millones de pesos equivalen al pago de dos meses de sueldo del personal municipal; al 100% del presupuesto anual del Concejo Deliberante; a la construcción de 15 centros de salud; y 100 cuadras de pavimento.
Además López expresó que: “no podemos seguir dependiendo del residuo financiero, hay que terminar con este ahogo hacia la ciudad, necesitamos esos fondos para seguir construyendo la Río Grande que todos deseamos”.
Asimismo, manifestó que “la información oficial del Gobierno Provincial intenta confundir a los vecinos de la ciudad, hoy el Gobierno se está financiando con recursos que le corresponden a los vecinos y vecinas de Río Grande”.
El Secretario de Finanzas Públicas recordó que “cuando ellos estuvieron a cargo de la intendencia de nuestra ciudad siempre fueron enfáticos ante la deuda de coparticipación del Gobierno de la Provincia y, en el momento que les tocó la responsabilidad de conducir la Provincia, no solo sostuvieron el mismo ahogo financiero, sino que lo han profundizado”.
Finalmente, señaló que “el intendente Martín Pérez siempre mantuvo la voluntad de diálogo desde el inicio de su gestión, pero la respuesta del Gobierno de la Provincia siempre fue la misma: más atraso y más ahogo financiero. Luego de 8 años de gestión municipal, los funcionarios de la Provincia conocen el perjuicio financiero que provoca el atraso de coparticipación”.