El equipo de investigación del Centro Nacional Patagónico (Cenpat) divisó en el primer sobrevuelo un grupo de 63 crías de ballenas que nadan en grupo con sus madres en las aguas del Golfo Nuevo, al sur de Península Valdés, sobre un total de 301 ejemplares censados.
"Se trata del primer conteo, todo es muy preliminar, pero evidencia una buena presencia que irá creciendo con el paso de los días", destacó en diálogo con Télam Enrique Crespo, responsable del Laboratorio de Mamíferos Marinos del Cenpat, organismo dependiente del Consejo Nacional de Investigaciones (Conicet).
En los sobrevuelos -los primeros de la temporada- se censaron 171 machos solitarios, cuatro en grupo de cópula, y de manera dispersa 63 madres con sus 63 crías recién nacidas.
Las ballenas francas australes arriban cada año a las costas de Península Valdés para cumplir con un nuevo ciclo de reproducción: hembras que dan a luz a sus crías, hembras y machos adultos que llegan para aparearse, juveniles que socializan y otras hembras adultas que traen consigo a la cría para su destete.
En el espacio de Península Valdés y su "zona de amortiguación" que llega hasta la desembocadura del río Chubut por el sur y el golfo San Matías por el norte, se llegaron a contabilizar en las últimas temporadas alrededor de 1700 ejemplares, frente a los poco más de 700 que se observaban en la década del 90.
"Ahora se observan ballenas en una cobertura mucho mayor que la Península Valdés, porque hay ejemplares desde Bahía Engaño (a la altura de Rawson) hasta la zona del golfo San Matías, en el sureste de Río Negro", detalló Crespo.