Limansky, la tradicional fábrica de colchones, firmó un “acuerdo preventivo de crisis” con SOIVA (Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines) a partir del cual, suspendió por una semana a sus 500 obreros, ante la falta de producción.
Esto era una versión que venía circulando desde hacía ya varias semanas en la ciudad y en las últimas horas se terminó confirmando. El acuerdo se rubricó este martes, ante las autoridades del Ministerio de Trabajo y alcanza a los meses de marzo y abril. ¿El motivo? La caída en las ventas de forma casi vertical desde finales del año pasado hasta ahora. El consumidor, con las dificultades permanentes y cotidianas para comprar alimentos y remedios, pagar el transporte y las prepagas -entre otras cuestiones- postergó cualquier tipo de compra en sommiers, almohadas, colchonetas, etc. Además, con la devaluación, todos los insumos de la empresa (químicos importados) duplicaron su valor. La ecuación económica es inviable si no hay una recuperación del consumo.
Marcelo Lombardo, secretario general del SOIVA, en declaraciones a la prensa, indicó que “El personal involucrado es todo el personal de planta, todo lo que es producción, que son todos los trabajadores afiliados a SOIVA, y todo lo que es administración, que son trabajadores afiliados al Centro de Empleo de Comercio y a Viajantes de Comercio”.
En declaraciones a Rafaela Noticias, el exJefe de Gabinete de la Municipalidad de Rafaela confirmó que este acuerdo implica la licencia por una semana por mes “A todos los trabajadores, de manera rotativa”. Es decir, en lugar de trabajar 4 semanas, lo harán 3 y en la restante, se quedarán en su casa.
Por esa semana no trabajada, se pagarán el básico de convenio, los premios de asistencia, bonificación por puntualidad, el viático y refrigerio, que son todos adicionales de convenio. “Nosotros tenemos esos ítems incorporados en nuestro convenio colectivo de trabajo y se estaría pagando todo eso a la gente”, dijo Lombardo. Lo que queda por fuera de este acuerdo es el premio por producción.
En los próximos dos meses, marzo y abril, todos los conceptos antes mencionados se abonarán pero como “no remunerativo”, con lo cual, la empresa se verá eximida de pagar aportes por los mismos.
La empresa presentó un programa que tiene 4 etapas, de dos meses cada una. Por ahora, el acuerdo alcanza a la primera. Dede SOIVA aclararon que este acuerdo no implicaba la aceptación de una segunda etapa, sino que se evaluará la situación llegado el momento.
Otras empresas
Al menos una valvulera de la ciudad, también ya adelantó todas las vacaciones del 2024. Lo mismo pasó con varias empresas PyME del sector metalúrgico. Lo que hacía rato no era un problema sistémico, ahora comienza a aparecer: el fantasma de la desocupación recorre Rafaela.
