Atlético de Rafaela está viviendo horas complicadas. Es que los hinchas comienzan a presionar por refuerzos, luego de la salida de jugadores clave en el torneo anterior, como Marcos Peano, Claudio Bieler o Facundo Soloa. Y a esto, ahora, se le suma un conflicto institucional, con la renuncia del expresidente y el hasta hoy vicepresidente 1°, Silvio Fontanini.
¿Qué fue lo que pasó? Hasta ahora, tenemos una sola versión, que es la del propio Fontanini, quien dio a conocer los motivos de la renuncia.
En la misiva dirigida al Consejo Directivo de la Asociación Mutual Social y Deportiva Atlético de Rafaela cuenta que mantuvo una reunión con el presidente de la institución, Dr. Diego Kurganoff y de la cual también participó Andrés Boidi. “En esa ocasión se me planteó, por parte del Sr. Presidente, que no consideraba un accionar ético que el Sr. Fabricio Fontanini ejerza su profesión de representante de jugadores en tanto yo detento el caracter de vicepresidente”.
Vale destacar que Fabriciio Fontanini, quien fuera uno de los referentes del plantel hasta la conclusión del torneo pasado y que, tras el mismo, decidió “colgar los botines”, se convirtió en representantes de jugadores. Uno de ellos, Agustín Bravo, dejó las filas celestes para pasara a Rosario Central.
“No observo falta ética alguna a mi condición de vicepresidente de la institución” dice Silvio y destaca en una segunda parte que durante su paso por la dirigencia nunca tuvo trato con su sobrino, justamente, para evitar inconvenientes.
Quien también habló fue “El Muro”. “No comparto en absoluto el planteo del sr. presidente, todos saben muy bien lo que representa este club para mi y mi familia”, dijo el exdefensor.
“En cuanto a la ética, todos saben internamente como era mi relación son Silvio como dirigente del club. Tanto Silvio como yo siempre evitamos que nuestra relación familiar contamine la relación dirigente-jugador, en pos de mantener la trasparencia y no dar lugar a sospecha alguna”, agregó.
¿Cuáles pueden llegar a ser las secuelas de esto, que se da a horas del 117° aniversario de la institución? Nadie lo sabe. Pero seguramente dejará marcas.