Comenzó el juicio por el crimen del kiosquero de Ramos Mejía: “Apelamos únicamente a la perpetua porque el asesino nos condenó para toda la vida”

A casi un año de la muerte de Roberto Sabo, Daniel Suárez, el único acusado del caso, declaró ante los jueces. La familia de la víctima pide justicia y consideran que la condena perpetua “sería poco”.

Comenzó el juicio por el crimen del kiosquero de Ramos Mejía: “Apelamos únicamente a la perpetua porque el asesino nos condenó para toda la vida”
Roberto Sabo, el kiosquero asesinado en Ramos Mejía.

Casi un año después del asesinato de Roberto Sabo, el kiosquero de Ramos Mejía, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°2 de La Matanza inició el juicio de la causa para indagar al único acusado de la tragedia del 7 de noviembre de 2021. El fiscal del juicio es Sergio Antín.

Este martes por la mañana, Daniel Suárez, acusado de “robo agravado por el uso de arma de fuego y por la participación de un menor de edad, homicidio criminis causae, portación y tenencia ilegal de arma, robo agravado y hurto agravado, todos en concurso real entre sí”, declaró frente a las autoridades en la sede que se encuentra en la localidad de San Justo. Además del acusado, los jueces Arturo Gavier, Lucila Pacheco y Diego Burgueño dieron lugar a un debate que implicó el testimonio de otras personas.

En diálogo con TN, Nicolás Sabo, el hijo de la víctima, dijo que lo primero que se hizo fue la presentación del juicio. Luego, “Tomi y yo pedimos salir cuando declaró el imputado. No nos interesa lo que diga, seguramente relató cosas muy fuertes para nosotros, del momento en el que asesinó a mi viejo”, expresó.

El dolor que siente el joven que perdió a su padre es tan grande que no le importa lo que pueda llegar a decir Suárez. “No le quise dar entidad. No la merece. Adentro se quedaron nuestros familiares”, contó el hijo de Sabo.

Roberto Sabo. El hombre asesinado el domingo, en una foto de archivo junto a sus hijos (Facebook).
Roberto Sabo. El hombre asesinado el domingo, en una foto de archivo junto a sus hijos (Facebook).

Nicolás dijo que también declararon el remisero que llevó al asesino hasta el lugar, y uno de los policías que llegó ese día al kiosco. “Uno de nuestros abogados nos dijo que estamos ganando el primer tiempo”, enunció.

Por último, el joven aseguró que desea que “una persona buena y laburante como era mi viejo pueda descansar en paz. Apelamos únicamente a la perpetua, aunque igual nos parece poco porque el asesino nos condenó a perpetua para siempre. Para toda la vida”, declaró.

El día del crimen al kiosquero de Ramos Mejía

El fiscal Federico Medone determinó que el ataque criminal del 7 de noviembre de 2021 comenzó cuando Suárez viajó hasta Ramos Mejía en un remis junto a una adolescente de 15 años.

El imputado le ordenó al conductor de un Ford Focus que vaya hasta esa zona. Luego, pidió que se detuviera un momento en el kiosco “Drugstore Pato”, en el que trabajaba Sabo. Así fue que, según la Justicia, Suárez entró al negocio con “una pistola semiautomática 7,65 mm o similar al calibre 32, con numeración suprimida, cargada con al menos un cartucho, y un revólver calibre 22″.

Leandro Daniel Suárez (30) y una adolescente de 15 años, detenidos por el crimen del quiosquero en Ramos Mejía (La Matanza) - Twitter @igonzalezprieto
Leandro Daniel Suárez (30) y una adolescente de 15 años, detenidos por el crimen del quiosquero en Ramos Mejía (La Matanza) - Twitter @igonzalezprieto

Cuando ya estaba adentro del local, atacó al hombre de 45 años, robó $10.000 de la caja y le disparó seis balazos a Sabo, quien murió en el acto.

Luego de matar al kiosquero, Suárez volvió a subir al vehículo del remisero y lo amenazó con la misma arma, le robó 6 mil pesos, un teléfono celular y el auto con el que más tarde intentó escapar.

Unas cuadras después, los delincuentes chocaron el vehículo y cambiaron su vestimenta en un supermercado. Además, le robaron la moto a un delivery y le saquearon su teléfono, 1600 pesos y documentación personal. Finalmente, Suárez y la adolescente fueron detenidos en Ramos Mejía.