"Tuve un Dios aparte", dijo antes de recibir el cheque millonario que invertirá en "pagar cuentas y remodelar la casa, que se encuentra venida abajo".
Contó que desde hace un tiempo había dejado de participar de este juego del IPLyC SE, pero que el jueves fue a la casa de su mamá, que vive en el barrio Sesquicentenario, y "como ella me pidió que fuera a confeccionarle una boleta -en la Agencia N° 0229, de Mónica Lia De Marchi-, hice una para mí".
Anotó cuatro números de los que siempre jugaba y a los otros cuatro, los eligió al azar. Pasado el mediodía, la mujer regresó a su casa, en la Zona Sur de la ciudad, pero dejó la boleta en el domicilio de su madre.
Al momento del sorteo, "mamá me llamó y preguntó si estaba controlando, le dije que no porque no me gusta ver el sorteo. Pero ella no sabía que mi boleta había quedado en su casa, debajo de una virgencita, que siempre coloca sus apuestas". Así que al comprobar que no fue premiada, al promediar la tarde la dueña de casa, hizo una limpieza de esos tickets y los tiró a la basura. Cuando una persona de la agencia fue a avisar que en esa vivienda residía el ganador del primer premio de la Poceada, se armó un revuelo.
"Yo estaba segura que solo hice seis puntos, pero le dije a mi hermana que controle por las dudas. Y fue entonces que tuvo que rescatar la boleta del cesto de residuos, que no habían sacado a la calle, de casualidad. Generalmente mi mamá tira la basura cuando papá saca el auto para ir a trabajar, pero como ese día él se fue caminando, ella no cumplió con la rutina. Gracias a Dios, mi boleta estaba bien arriba, se había manchado con los restos de yerba pero los números estaban legibles".
Cuando confirmó la buena noticia, "me largué a llorar. Lo llamé a mi esposo al trabajo para contarle, pero él no entendió, así que cuando volvió a casa recién supo lo que había pasado", relató la joven, al tiempo que aseguró que "voy a seguir jugando". Sostuvo que la agencia le trajo suerte porque en la misma ya había sacado 700 pesos a la quiniela.
El jueves 4, el segundo premio, de 179.530 pesos, se repartió entre dos afortunados. En el tercer premio, 48 jugadores se dividieron 68.110 pesos. El pozo estimado para el sorteo de esta siesta es de 1.720.000 pesos.