Filtraron un video del streamer Momo en la facultad y pidió una dura sanción

El streamer Gerónimo Benavides, conocido como “Momo”, ha abierto debate en las redes sociales en las últimas horas tras lo ocurrido en la UNLP.

Filtraron un video del streamer Momo en la facultad y pidió una dura sanción
Filtraron un video del streamer Momo en la facultad y pidió una dura sanción.

El streamer platense Gerónimo “Momo” Benavides volvió a estar en el centro de la miradas tras viralizarse un video en el que se lo ve rindiendo un examen oral en la Facultad de Jurídicas y Sociales de la Universidad Nacional de La Plata. La grabación, hecha sin su consentimiento durante una clase virtual, desató una fuerte reacción del ahora ya abogado.

El enojo inicial y el pedido de sanción

Indignado por la exposición, Momo subió un video a sus redes donde exigió una sanción contra el estudiante que lo filmó. “No pido la expulsión, pero quiero que no pueda cursar por un año, que si quiere dar la materia que la dé libre”, expresó, visiblemente molesto.

Con tono irónico, cuestionó el argumento de que por ser figura pública se lo podía grabar: “En el ámbito privado no tenés derecho a filmar a una persona, sos un pel…”, lanzó sin filtros, defendiendo su derecho a la intimidad incluso siendo un personaje conocido.

También anunció que pediría a las autoridades que el alumno pierda la regularidad de la materia, argumentando que rendir un examen es un momento personal y no puede ser vulnerado de esa forma.

Se retractó y pidió disculpas

Sin embargo, horas después y ya más calmo, Momo reconoció que había exagerado en su reacción. Aunque sostuvo que lo ocurrido fue “repudiable”, modificó su postura inicial y se disculpó públicamente:“La verdad que me equivoqué, fui injusto al decir esto. Tengo razón en mi planteo, pero es desmedido y va en contra de lo que pienso si hago eso por actuar en caliente”.Y agregó: “Por más que sea un idiota el que hizo eso, jamás querría que pierda posibilidades”.

Un debate abierto sobre privacidad y redes

El caso abrió nuevamente el debate sobre los límites de la exposición, el derecho a la privacidad en espacios académicos y el rol de las redes sociales. ¿Hasta dónde se puede grabar a alguien por ser figura pública? ¿Qué pasa cuando eso ocurre dentro de un aula, en una instancia evaluativa?

Hasta el momento, la Facultad de Derecho no emitió un comunicado oficial, pero el tema ya es conversación en pasillos y foros universitarios. Mientras tanto, el episodio refleja cómo la viralización de lo íntimo sigue generando tensiones entre lo público y lo privado, incluso en contextos donde el respeto debería ser la norma.