Villarruel cedió a la presión y congeló las dietas de los senadores hasta el 31 de marzo

La vicepresidenta finalmente prorrogó la suspensión de aumentos a pedido de todos los bloques políticos, menos Unión por la Patria. Así evitó que los sueldos escalaran a $9,5 millones en febrero.

Villarruel cedió a la presión y congeló las dietas de los senadores hasta el 31 de marzo
La vicepresidenta Victoria Villarruel prorrogó el congelamiento de las dietas (Foto: Federico López Claro)

Tras semanas de idas y vueltas, la vicepresidenta Victoria Villarruel cedió a la presión social y de la propia Casa Rosada y prorrogó, en un decreto de su puño y letra, el congelamiento de las dietas de los senadores nacionales hasta el próximo 31 de marzo, para evitar que el monto escalara en febrero a $9,5 millones en bruto.

Después de haberse resistido a avanzar por motu proprio y de impulsar una definición colectiva, Villarruel firmó finalmente el decreto 1/25 con aval de todos los bloques políticos menos Unión por la Patria, que a diferencia del resto de los bloques (que presentaron distintas notas ante la vicepresidenta) no pidió frenar los aumentos.

“He firmado el decreto que ordena el congelamiento de las dietas de los senadores hasta el 31 de marzo de 2025 para que lo traten en sesiones ordinarias. Adhirieron a mi pedido los bloques Frente Renovador de la Concordia Social, LLA, PRO, UCR, Las Provincias Unidas y Libertad, Trabajo y Progreso. Es mi intención que el Senado acompañe al pueblo argentino en el esfuerzo que está haciendo”, anunció la titular de la Cámara Alta en redes sociales.

El documento suspende desde el 1° de enero hasta el 31 de marzo “la aplicación de toda actualización en el valor del módulo establecido en la DR 8/24 en las dietas y cualquier otro ítem que integre la remuneración de los senadores”.

La polémica se desató en abril, cuando el Senado votó una resolución para que sus dietas equivalgan a 2500 módulos (una unidad de medida acordada en la paritaria legislativa), más un adicional de 1000 módulos por gastos de representación y otros 500 por desarraigo. A eso se le sumó una “dieta número 13” a modo de aguinaldo.

Cuatro meses después, los senadores dieron marcha atrás y aprobaron un “desenganche” de la paritaria, por lo que las dietas quedaron congeladas. Esa resolución venció este martes, por lo cual las dietas volvían a calcularse en base al valor de los módulos y se disparaban a $9,5 millones. Pero Villarruel decidió finalmente volver a congelarlas.

“Ética de la solidaridad”

Aunque la vicepresidenta descomprimió de esa manera la tensión que se vive en el Senado y mitigó la interna con la Casa Rosada, obligó a los senadores a volver a discutir el tema cuando se reanude el período ordinario de sesiones, con el fin de encontrar una solución definitiva al tema, que sea votada y avalada en el recinto.

En los fundamentos de su resolución, Villarruel destacó que el congelamiento se aprobó en el recinto “en el entendimiento de que la política no puede quedar ausente del esfuerzo que se le pide a la sociedad a fin de reestablecer el orden económico perdido”.

“En atención a las políticas de esta gestión y la crisis económica actual resulta necesario que los representantes del pueblo compartan con el esfuerzo que efectúa la sociedad en su conjunto, guiados por la ética de la solidaridad y promoviendo políticas públicas acordes a la realidad”, sostuvo.

Además, Villarruel indicó que “el receso vigente y la continuidad de las razones que fundamentaron la suspensión” de los aumentos de dietas “hacen razonable” el dictado del decreto “en el marco de las competencias de la Presidencia del Honorable Senado de la Nación”.