“El martes, en las calles. El miércoles, en el recinto”. Con el envión de la marcha en defensa de las universidades, Unión por la Patria pidió una sesión especial para el miércoles con un temario que incluye siete proyectos para garantizar el financiamiento de las casas de altos estudios, otros siete para volver a poner en vigencia el FONID (Fondo Nacional de Incentivo Docente) y también las 14 propuestas para modificar la movilidad jubilatoria.
La sesión, aún no convocada oficialmente por Martín Menem, fue solicitada por el jefe del bloque peronista/kirchnerista, Germán Martínez, y otros 24 diputados de esa bancada, entre ellos Máximo Kirchner. Sin embargo, necesitan 129 presentes para el quórum y ninguno de los bloques que podrían destrabar el número fue consultado sobre la jugada, que corre riesgo de fracasar.
La intención de Martínez es forzar el debate de los proyectos en comisiones, ya que no cuentan con los dos tercios de los votos necesarios para tratarlos sobre tablas (es decir, sin dictamen previo). En el caso de las iniciativas sobre movilidad previsional, solo tienen despacho de la Comisión de Previsión y Seguridad Social y les falta el visto bueno de Presupuesto y Hacienda, que está bloqueada por su presidente, José Luis Espert.
Por lo tanto, el objetivo (que fue anticipado durante el debate) es aprobar un emplazamiento a la Comisión de Presupuesto, con día y hora, para dictaminar sobre los proyectos, que buscan mejorar la recomposición de los haberes jubilatorios respecto del DNU 274/24, con el que el Poder Ejecutivo modificó la fórmula jubilatoria y otorgó una compensación parcial por la inflación del mes de enero.
La misma estrategia es la que buscarán aplicar sobre los proyectos para garantizar el financiamiento de las universidades ante el congelamiento de fondos, y restituir el FONID, pensado para mejorar los salarios docentes en las provincias. Estos expedientes ni siquiera fueron tratados en comisiones (además de la de Presupuesto, tienen giro a Educación, presidida por el macrista Alejandro Finocchiaro).
“Si todas las y los diputados que suben flyers por la Marcha Federal Universitaria dan quórum al otro día en Diputados y sesionamos, podemos avanzar en una ley que garantice el financiamiento”, arengó Martínez por redes sociales. Su bloque tiene 99 miembros y hasta el momento solo cuenta con el Frente de Izquierda, que posee cinco.
La Libertad Avanza y el PRO no bajarán al recinto, pero en el bloque encabezado por Cristian Ritondo adelantaron que afinarán la estrategia este martes en reunión de bloque. La UCR aún no definió postura y quedó en una posición incómoda: no solo es un bloque con fuerte raigambre universitaria, sino que además fue el que presionó para abrir el debate jubilatorio en la Comisión de Previsión Social, que preside la radical cordobesa Gabriela Brouwer de Koning.
Dentro de la bancada afirman que entre siete y ocho diputados bajarían al recinto. Son los identificados con el neurocientífico Facundo Manes y los de Evolución Radical, donde tiene influencia Emiliano Yacobitti, vicerrector de la UBA. De hecho, el kirchnerismo hizo un guiño a ese sector e incluyó en el temario dos proyectos educativos de una diputada de ese grupo, Danya Tavela.
De todos modos, fuentes consultadas coinciden en que la cifra de presentes radicales podría ser más abultada si la marcha de este martes deriva en incidentes (la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció que se aplicará el “Protocolo Antipiquetes”).
En Hacemos Coalición Federal no hay una postura unívoca. El bloque, donde conviven diferentes expresiones políticas, ni siquiera pudo garantizar asistencia perfecta en una sesión pedida por sus propios integrantes para discutir la movilidad jubilatoria a mediados de marzo. Tampoco lo haría ahora.
Por caso, los cordobeses más fieles al gobernador Martín Llaryora (Ignacio García Aresca, Carlos Gutiérrez y Alejandra Torres) se niegan tajantemente a acoplarse a cualquier iniciativa impulsada por el kirchnerismo, pero Natalia De La Sota participará de la sesión. A ella podría sumarse la bonaerense Margarita Stolbizer, autora de uno de los proyectos para extender la vigencia del FONID.