La expresidenta Cristina Kirchner, condenada a seis años de prisión por corrupción, cumplirá la sentencia en su domicilio en la Ciudad de Buenos Aires bajo una serie de condiciones que limitarán su actividad.
Pese a que los fiscales le pidieron que rechace el pedido de arresto domiciliario, el juez Jorge Gorini aceptó la solicitud de la defensa y la exmandataria transcurrirá la pena en su departamento de la calle San José 1111 piso 2, en el barrio porteño de Constitución.
En las primeras horas de la mañana de este martes los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola elevaron un escrito al Tribunal Oral Federal N° 2 en el que pidieron que se rechace ese beneficio: “No se advierten razones humanitarias que justifiquen conceder una medida excepcional”, afirmaron.
Al no ser vinculante, Gorini no tomó en cuenta la opinión de los representantes del ministerio público y habilitó la prisión domiciliaria.
El magistrado le comunicó su decisión a CFK vía Zoom y de esta forma evitó que se traslade hasta los Tribunales de Comodoro Py.
La expresidenta había anunciado que se presentaría ante el TOF N°2 este miércoles, lo que motivó a su espacio político y sectores afines a convocar a una marcha en su apoyo. Pese a que no irá al tribunal la manifestación fue ratificada.
Gorini también ignoró el pedido de la Procuración de la Ciudad de Buenos Aires que había solicitado que no se acepte el domicilio de Constitución debido a las complicaciones que provoca en el barrio.
En su resolución, el fallo señaló que CFK debe “abstenerse de adoptar comportamientos que puedan alterar la tranquilidad del vecindario y la convivencia pacífica”.
A su vez, le emplazó a que en 48 horas presente una nómina de personas que integran su grupo familiar, cuerpo médico y abogados que serán los únicos que podrán visitarla.
