Luciana Teresita Bustos, investigadora del Conicet y licenciada en Historia de la Universidad de San Juan, está acusada de asesinar de seis puñaladas a su amigo Marcelo José Amarfil en el marco de un supuesto juego sexual. Sin embargo, a través de su abogado, asegura que fue víctima de un intento de violación y que actuó en legítima defensa.
El giro en el caso de la científica del conicet
Según explicó el abogado Néstor “Roly” Olivera, Luciana, de 34 años, “es lesbiana desde la adolescencia y está en pareja con una mujer desde hace cuatro años”. En ese contexto, argumentó que la relación sexual con Amarfil no fue consentida. “Fue una violación. La redujo atándole las manos y se le tiró encima en el asiento del acompañante. Incluso eyaculó sobre su cuerpo”, afirmó.

El letrado detalló que su clienta no declarará por recomendación de su psiquiatra, debido al fuerte impacto emocional que le genera revivir los hechos. “Amarfil era su mejor amigo y todo el recuerdo le provoca demasiadas emociones”, sostuvo.
Luciana y Marcelo se conocieron hace seis años en un gimnasio y forjaron una estrecha amistad. Ella le prestaba su auto con frecuencia y compartían salidas. La familia de Amarfil sostiene que entre ellos había una relación sentimental: “Ella venía todas las noches a casa y tomaba mate con mi hermano”, dijo la hermana de la víctima.
Sin embargo, la defensa presentará testigos que asegurarán que Bustos siempre se identificó como lesbiana. Además, aportarán un video en el que se ve a ambos ingresando y saliendo de un restaurante como simples amigos, sin muestras de afecto.
El abogado también reveló que Amarfil llevaba pastillas de viagra y esposas, las cuales habría utilizado para someterla contra su voluntad.
Por su parte, el fiscal del caso se apoya en una pericia psicológica que describe a la imputada con “rasgos de tipo perverso y psicopático, conflictos con la sexualidad y figuras parentales, conductas agresivas y mecanismos de manipulación”.
La investigación continúa mientras se espera la definición sobre si Bustos podrá declarar o no en las próximas semanas. La causa mantiene abiertas varias líneas, entre la hipótesis de un ataque premeditado y la de una reacción desesperada ante una situación de abuso.