Un caso de “legítima defensa”, un delincuente que resultó muriendo, una despedida por redes sociales a quien falleció, aunque su muerte se dio a manos de la mujer a la que había querido asaltar. Todo esto es lo que trae consigo esta historia.
Se trata de Rodrigo Manuel Yugar, alias el “Chapu”, de 21 años, un motochorro que el miércoles pasado quiso asaltar a una joven de 27 años, armado con un cuchillo. Pero ni él ni su cómplice pudieron con ella, quien terminó arrebatándole el arma y acuchillándolo en lo que se considera como legítima defensa. Yugar murió desangrado en el lugar.
Así, familiares y amigos despidieron por redes sociales al joven muerto, dedicándole diversos mensajes de cariño: “Cuánto dolor Dios, por qué no me escuchaste cuando te hablé, Chapu. Te vamos a extrañar siempre, dejaste un vacío inmenso en nuestras vidas. Que Dios te tenga en la gloria. Volá alto, Chapu”, uno de los mensajes que se puede leer.
“Qué hago sin vos, mi hermanito del alma, estoy muerto”, escribió sentido un familiar, mientras que un amigo posteó: “Despertarme y ver esto. No lo puedo creer, Chapulín, toda una vida por delante que seguir. La última vez que te vi fue cuando te trajimos de la parada con tu mamá. Descansá y dale fuerza a tu mamá para seguir. Te pido que desde el cielo siempre me cuides a Lucas”.
A su vez, una chica que al parecer era su pareja, publicó: “Ojalá algún día puedas ver esto ¡Te adoro y sos mi amor de siempre! Volá alto, mi negro lindo. No te merecías esto y todo el mundo lo sabe ¡Sos y siempre vas a ser el amor de mi vida! Besos al cielo”.
Al mismo tiempo, también sus allegados publicaron un CVU de Mercado Pago, con el fin de recaudar fondos para los gastos del sepelio de Yugar.
El intento de robo en el que murió el motochorro
La joven de 27 años salió de su casa en la localidad de San Francisco Solano, en la provincia de Buenos Aires, a las 6.30 hs. este mismo miércoles, cuando fue interceptada por Yugar y su cómplice que se trasladaban en moto, con el objetivo de asaltarla.
Todo ocurrió en la intersección de las calles 846 y 895 de la mencionada localidad. La joven se dirigía al colectivo con rumbo a su trabajo. Los delincuentes la abordaron y la amenazaron con un cuchillo.
El forcejeo que vino después hizo que la joven lograra sacarle el cuchillo a uno de los delincuentes y terminó apuñalando a Yugar, que acabó muriendo desangrado en el lugar. El otro delincuente se dio a la fuga en la moto.
Por el hecho, la mujer se encuentra en libertad debido a que se constató que actuó en legítima defensa. Según testigos, Yugar le habría dicho a su cómplice “matala, matala”, antes de que su víctima le diera el cuchillazo final.