El jardín de infantes “Santa Clara de Asís”, ubicado en el barrio La Estanzuela de Godoy Cruz, reúne tapitas y latas para mejorar el patio de juegos de los casi 200 alumnos que asisten a la institución. Con ayuda de los chicos, maestras y vecinos de la zona han logrado comprar algunos juegos.
//Mira también Las reinas de Maipú llevaron donaciones de los vecinos a un merendero de Beltrán
Creando conciencia y amor por el medio ambiente, las maestras de la institución incentivan a los alumnos a juntar materiales reciclables para poder mejorar su espacio de aprendizaje.
La idea de juntar tapitas surgió de la necesidad de arreglar el patio de juegos del jardín. “Era una ripiera para los chicos, teníamos que renovar ese espacio para su recreación”, dijo la directora del jardín Fernanda Castellani a Vía Mendoza.
Un nuevo patio de juegos
En un principio identificaron a una empresa de Entre Ríos que transforma las tapitas de plástico en juegos, pero existía una imposibilidad económica para trasladar los materiales de una provincia a la otra. Por ello, decidieron comenzar vender todo el material que recopilaban a la planta recicladora de Godoy Cruz.
Con el dinero en mano pudieron comprar juegos nuevos para el jardín infantil y realizar un nuevo contrapiso que esta vez tendría como decoración una rayuela con tapitas de plástico.
Para continuar inculcando la sustentabilidad, las maestras crearon un arenero con pallets y la institución tiene su propia huerta. En ella, los alumnos aprenden a trabajar la tierra de manera divertida.
La comunidad en acción
Para juntar la mayor cantidad de tapitas posible las maestras crearon un sistema de “canje” entre los negocios vecinos y el jardín. La idea era dejar puntos de recolección de tapitas en los locales a cambio de una foto de la fachada del lugar para que la comunidad educativa compre en en ese lugar.
Por su parte, los niños del jardín colaboran diariamente con la causa. “Los chicos traen todos los días una bolsita con tapitas o latas que juntan camino a casa”, indicó la docente. Castellani explicó que la mayoría de los padres del jardín son recuperadores de residuos y para ellos es una actividad cotidiana.
//Mira también La primera helada del año anuncia la llegada del invierno en Mendoza
Reciclaje solidario
La directora de la institución comentó que hay alumnos que no cuentan con los recursos suficientes como para abonar el transporte público todos los días. Por ello, utilizan el sistema de EcoCanje impulsado por la Municipalidad del departamento.
En él, pueden canjear botellas PET por carga para tarjeta SUBE (24 botellas a cambio de 60 pesos de crédito). “Utilizando este sistema, no solo ayudamos al ambiente, sino que también ayudamos a que nadie falte a clases por no tener con qué pagar un pasaje”, concluyó la docente.