Desde el gobierno de la vecina provincia acusan a Mendoza de hacer lobby para que no se concrete el proyecto del túnel Agua Negra, la iniciativa busca unir San Juan con Chile. La administración del gobernador Sergio Uñac sufrió un duro revés cuando se hizo oficial los dichos sobre la renuncia del gobierno trasandino al crédito que el BID le había otorgado a Chile y la Argentina para la construcción de la obra binacional.
El que lleva la voz cantante en esta acusación es el ministro de Obras y Servicios Públicos de San Juan, Julio Ortíz Andino, quien en una entrevista con Diario Huarpe, sostuvo que Mendoza ha hecho lobby en contra de la propuesta. Según el ministro, Mendoza se ha opuesto desde siempre a la apertura del paso en la vecina provincia.
Por otra parte afirmo que el gobierno chileno decidió seguir centralizando todo en Valparaíso. El funcionario sanjuanino consideró que para reflotar el proyecto de Agua Negra habrá que esperar el fin de mandato de Sebastián Piñera.
Ortíz Andino, quien actúa como vocero de la administración sanjuanina, aseguró que “cuando este financiamiento surgió por parte de una importante gestión de que llevó Prat Gay adelante, Mendoza no estuvo muy conforme con eso y empezó a moverse con el embajador que teníamos en Chile el mendocino, José Octavio Bordón”.
Desde San Juan afirman que, la obra que ofrece una salida al Pacífico a través del Puerto de Coquimbo, causaría un descenso en la cantidad de vehículos que circulan por el paso los libertadores
Por lo que con Agua Negra en funcionamiento, el paso mendocino perdería gran parte del tránsito de la producción del norte y centro argentino que sale al Pacífico.
Quienes defienden el proyecto explican que como ventaja, el túnel de Agua Negra sería más bajo y por su infraestructura garantizaría que no tenga que cerrar intermitentemente en época de invierno.
Por el momento, con la negativa de Piñera, San Juan llevará el tema a la Cancillería y esperan mantener en agenda el proyecto hasta que cambie el gobierno de Chile.
Historia del proyecto
- A fines de 2015, el BID aprobó un préstamo de 1.500 millones de dólares para financiar la construcción del túnel.
- Cada país se comprometía a devolver el porcentaje del crédito de acuerdo a la parte de la obra que está en su respectivo territorio.
- Argentina, que tiene la mayor extensión del túnel, reintegraría el 72% del monto, mientras que Chile, el 28% restante.
- El gobierno de Piñera renunció a esa parte del crédito.
- En el proceso licitatorio se llegó a realizar una precalificación de empresas y consorcios de China, España, Rusia, Austria, de Argentina, Chile y Brasil, entre otros.
- Ese trámite paso quedó en la nada, ya que no se llamó a licitación por el freno que le impuso Chile a la megaobra.
Fuente: El Sol, Diario Huarpe.