Mujeres emprendedoras y el desafío de nunca rendirse: La historia detrás de“Las Marías”

Una tunuyanina cuenta cómo fue su experiencia a la hora de tener que emprender y volver a su tierra natal. Cuáles son los desafíos que normalmente enfrenta y su deseos de seguir creciendo en el rubro.

Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías
Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías Foto: Alejandra Reján

Alejandra Reján es una mujer que no se sabe dar por vencida, y es que ante cada piedra en el camino, la mendocina de 59 años, ha podido sortearla “remándola”. Hoy cuenta con un emprendimiento llamado “Las Marías” en su casa de Tunuyán y se dedica a trabajar el chocolate en sus múltiples formas.

Dicen que soñar con los ojos abiertos vale doble y esta mendocina lo demuestra con su trabajo en el día a día. “Tener mi propio negocio seria un gran sueño” confiesa Alejandra que no baja los brazos para volverlo realidad.

Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías.
Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías. Foto: Alejandra Reján

La historia de “Las Marías” se parece a la historia de muchas mujeres que decidieron o tuvieron que comenzar su propio negocio. Tras su divorció y con sus hijas ya grande Alejandra tuvo que encontrar una forma de mantenerse y ganarse la vida. Fue entonces que decidió retornar a Mendoza luego de vivir muchos años en la vecina provincia de San Luis.

“En realidad mis hijas ya están grandes y comenzaron a viajar,y yo ya extrañaba mi lugar. Me había divorciado hacia unos años,y tengo a mi familia y amigos acá.” Le contó la fundadora del emprendimiento chocolatero a Vía País.

Toda historia tiene un comienzo

Si bien no ha sido fácil toda historia tiene un comienzo. El emprendimiento comenzó cuando Alejandra se divorció y tenía que encontrar una forma de ganarse la vida. “Primero empecé haciendo algunos bombones y algunas golosinas en chocolate para reuniones familiares, sin tener demasiada idea” relata Alejandra.

“Luego empezó a gustarme y comencé haciendo paletas para algunos kioscos de barrios cerca de mi casa, cuándo en ese entonces vivía en San Luis”. Luego fue que la mendocina decidió volver a su tierra natal en Tunuyán, Mendoza, hace casi 4 años ya.

Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías
Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías Foto: Alejandra Reján

En ese momento Justo comenzó la pandemia y ante el difícil panorama, que atravesaba la oriunda de Tunuyán, confiesa que le fue muy bien ya que hasta realizó delivery de chocolates. “Comencé a trabajar en chocolate, algunas golosinas ,chocolates con frutos secos,y también a inventar un poco, animarme a jugar y me encantó” enfatiza.

A medida que fue creciendo se animo a innovar y comenzó con cajitas y algunas propuestas para fechas especiales. “Así fue mi comienzo, acepte criticas constructivas y halagos, porque ahí es donde aprendí más”.

El desafío de muchos emprendedores: la economía y los precios

Una constante que se repite mucho en los emprendedores es el tema de los costos, los insumos y los precios. En Mendoza no es fácil dedicarse al rubro de la chocolateras ya que muchos de los insumos son importados, como el cacao.

Alejandra es critica con el panorama que les toca vivir: “Muchos de los insumos aumentan día tras día, el desafío es mantener los precios en estos tiempos difíciles, y poder seguir con la misma calidad de siempre. Y otro desafió para mí, son los meses de verano donde bajan bruscamente las ventas, pero siempre estoy haciendo algo ,de repostería para contrarrestar”.

La situación esta cada vez mas difícil, sobretodo para los emprendedores, que vivimos de lo que generamos, sin otra entrada o sueldo mensual digamos” confiesa.

Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías
Alejandra Reján, la emprendedora detrás de Las Marías Foto: Alejandra Reján

Aún ante tantos obstáculos y desafíos la mendocina no deja de soñar con algún día poder expandirse. “Lo mio es muy a pulmón, todo es manual, ya que no tengo máquinas ni empleados, es desde mi casa, este pequeño emprendimiento”.

Así como ella, muchas mendocinas se animan a emprender y es en ese momento que muchas veces la necesidad a nivel económico termina conectando con pasiones que van mucho más allá. Alejandra Reján está lejos de rendirse: “Tener mi propio negocio seria un gran sueño, igual me encantaría que algunos locales pudieran revender mis productos,seria una muy buena ayuda ahora”.