Continúan las versiones cruzadas en torno a la condena en contra de Lautaro Martínez y Agustina Gandolfo por el “despido ilegítimo” de la niñera Milagros Lizzola. La pareja cuestionó duramente la actitud de la familia y sostuvieron que buscan “aprovecharse de la muerte de un hijo para sacar plata”, y la parte denunciante no se quedó callada.
Milagros, que era amiga de Gandolfo, trabajó desde septiembre del 2021 en la casa de Lautaro Martínez cuidando a la pequeña Nina, pero por un cuadro de salud delicado en julio del 2022 tuvo que ser internada y dejó de ir a trabajar. En el medio de esta situación, la joven fue despedida y por irregularidades en esto, la familia Lizzola inició acciones legales: la Justicia de Milán falló a favor de ellos y ahora el futbolista deberá pagarle una importante suma de dinero.
Habló la madre de Milagros Lizzola: “El señor futbolista me agredió bastante”
Laura Lembo, madre de la joven que murió en enero del 2023, habló con A la tarde, y detalló que Milagros y Gandolfo fueron a la escuela primaria juntas. Y detalló: “Se fueron reencontrando al tiempo. Mi hija ha estado en varios episodios de internaciones y operaciones. La enfermedad de mi hija viene de larga data y en abril de 2021 partió a Italia con ella”.
Además, contó que su hija estudió para Maestra Jardinera, y esto fue una de las razones por las que Gandolfo la eligió, sabiendo que había estado en un tratamiento médico en 2019. Al mismo tiempo, fue contundente sobre la relación que ella tuvo con la pareja, todo por WhatsApp: “El señor futbolista me agredió bastante y yo le dije: ‘Vos sos padre, nunca vas a juzgar a una madre o un padre por lo que hacen’”. Según la mujer, esto se dio cuando le pidió retirar pertenencias que la joven dejó en su casa, y ellos no estaban.
Sobre los últimos momentos que su hija compartió con Gandolfo y Martínez recordó: “Milagros estuvo lúcida en todo momento y con mucho amor. Todos pueden decir cómo era. Ella no se podía trasladar y Agustina me decía: ‘te la tenés que llevar’. Ella tenía dos catéteres en su vientre y un tumor de grandes dimensiones, era muy riesgoso trasladarla en ese momento”.
Respondiendo a los dichos de la mendocina y el delantero del Inter, Laura sostuvo que nunca quisieron hacer esto mediático ya que ellos tienen sus trabajos y actividades, por lo que ni ellos, ni su abogado, Giuseppe Vadalá, querían hablar con la prensa. Pero esto cambió luego de que se conociera el fallo y los cuestionamientos de los denunciados.
“Salgo a hablar porque ya es demasiado lo que se dice. Si hablamos de respeto, hablemos de respeto, que se respetó a la vida y la amistad”, dijo Laura antes de quebrarse. Luego destacó que siempre fue una relación “cordial” y destacó que “Milagro estuvo muy bien con ellos”. Pero en un momento destacó: “Mi hija estaba agonizando y esta chica le mandó una carta que la iba a denunciar por un millón de euros. Estábamos entrando a rayos”.
“Simplemente, continuamos el juicio que inició mi hija y que nos dijo que continuáramos”, remarcó la mujer y cerró: “No hay ningún otro trasfondo. Nosotros no somos conocidos, los conocidos son ellos. Nosotros ya tenemos otra vida con un perfil totalmente distinto al de esta gente”.
Al mismo tiempo, destacó que en un momento, el diálogo con Martínez y Gandolfo se cortó, y que la única ayuda que recibieron fue “de una fundación que nos ayudó con el alquiler, colectas que hicieron allegados y nuestros trabajos, que seguimos manteniendo”. Al ser consultada sobre por qué se iniciaron las acciones legales, la mujer detalló que Milagros le pidió a su amiga que le mantuviera el contrato para seguir contando con el seguro hasta que pudiera volver a Argentina.
“Ahí le dijo que ya había hablado con sus abogados: o renunciaba en ese momento y le pagaba lo que se debía o esperaba a los 45 días del contrato, pero iba a cobrar en agosto, que fue lo que pasó”, detalló la mujer, que reconoció que Agustina le pagó el pasaje de ida a Italia.
Qué dijeron Agustina Gandolfo y Lautaro Martínez sobre la condena
La primera en acudir a las redes fue Agustina Gandolfo, quien cuestionó duramente las publicaciones de algunos medios italianos y la posición de la familia Lizzola. La mendocina sostuvo que ellos esperaron a que “esté por morir y que no esté lucida, para intentar sacarnos dinero y aprovecharse de la situación”.
Y en otra parte del descargo, sostuvo que “asumimos a una persona que ya estaba enferma, amiga de toda la vida, hasta que lamentablemente no pudo trabajar más porque su enfermedad no se lo permitió”.
Al mismo tiempo, Gandolfo sostiene que “después de hacer mucho por ella y su familia, desde hacernos cargo de sus pasajes para que vengan, ayudar a encontrar camas en el hospital cuando estaba colapsado, ayudar con su tratamiento, con el alojamiento de su familia a la cual tuvimos que CONVENCER para que vengan a cuidar a su hija que se estaba muriendo”.
“Después de darlo todo, esperaron a que su hija esté por morir y que no esté lúcida para intentar sacarnos dinero y aprovecharse de la situación, no solo eso sino que después de su muerte siguieron insistiendo y les salió muy mal, no podía ir de otra forma”, remarcó la mendocina, pese a que el fallo fue a favor de la familia Lizzola y que deberán pagarle una importante suma de dinero.
Qué dice el fallo que condenó a Lautaro Martínez
CUÁNTO TIENE QUE PAGAR LAUTARO MARTÍNEZ A LA FAMILIA DE SU NIÑERA
El abogado del delantero argentino, Anthony Macchia, sostuvo que el despido se hizo “seis meses antes de su muerte”, y hasta señaló que ella lo había solicitado “para poder beneficiarse de salarios diferidos e indemnizaciones por su determinación de regresar a su tierra natal, Argentina”.
Sin embargo, la Justicia italiana falló a favor de la familia Lizzola y según detalla Corriere della Sera, el delantero de la Selección Argentina deberá pagar “una indemnización equivalente al menos a quince meses del salario final de referencia, además de los gastos judiciales”.
Al mismo tiempo, Macchia detalló que no es cierto que Lautaro no haya querido “conciliar y poner fin a un litigio en el que era demandado”, y destacó que el futbolista “se puso a disposición para entregar las cantidades indicadas por el Juez de Trabajo del Tribunal de Milán (además, muy superiores a los indicados entonces en la parte resolutiva de la sentencia por el propio magistrado) a una asociación benéfica a elegir a discreción del juez”.
Pero esto no fue posible ya que “el acuerdo no fue posible por la negativa de los herederos de la señora y sus abogados presentes en la audiencia”.