Un custodio del gobernador Rodolfo Suarez fue detenido cuando circulaba en su auto particular, vistiendo ropa interior, desorientado y alcoholizado, luego de haber estado compartiendo una velada con dos o tres mujeres en un departamento céntrico.
La novedad surgió en los primeros minutos de día, cuando ingresó al 911 un llamado denunciando que en Buenos Aires y San Juan de Ciudad, un hombre desnudo a bordo de un VW Bora de color negro había chocado con algunos autos.
El vehículo en el que se desplazaba D. C, un auxiliar de la Policía de Mendoza de 31 años que se desempeña como custodio del gobernador, continuó andando hasta San Martín y Honorio Barraquero donde fue detenido y el hombre se identificó como policía.
El hecho generó que se convocara a personal de Tránsito para hacerle un dopaje y que llegaran al lugar los jefes de recorrida nocturna de Ciudad y Godoy Cruz. También tomó intervención personal dela Inspección General de Seguridad que abrió una expediente al respecto.
El resultado de la prueba de alcoholemia arrojó 0,27 de alcohol en sangre. Al revisar las cámaras de seguridad, se pudo ver al auxiliar, saliendo de un departamento céntrico de la calle Buenos Aires, cubriéndose con una sábana.
En un primer momento el policía contó que se encontraba en San Martín y Amigorena de Ciudad y conoce dos mujeres, toma unas cervezas y no recuerda nada más aunque dice que había perdido la billetera y el celular.
Minutos más tarde ofrece otra versión: dice que había quedado en juntarse con unos amigos en San Martín y Godoy Cruz de Ciudad y mientras esperaba, fue abordado por tres mujeres que lo invitaron a un departamento ubicado en la galería Emperador. Allí, aprovechando que estaba en el baño, las mujeres le robaron la billetera y el celular y también la ropa.
Luego el efectivo fue llevado a su casa donde se encontró su arma y su chaleco antibala, que le fueron retenidos.
La policía siguió investigando el caso y logró dar con un hombre la calle Buenos Aires al 66, que les explicó que su hijo de 7 años había visto a un hombre que salió del edificio luciendo ropa interior y que le pidió que llamara a un taxi.
El encargado del edificio confirmó que le había alquilado al uniformado un departamento a las 21.30 y luego llevo a los investigadores al departamento en cuestión que estaba abierto. Allí se encontraron dos latas de cerveza.
Fuente: Los Andes