Un curioso hecho ocurrió la mañana de este jueves en Guaymallén, Mendoza. Un policía estaba de franco en su casa y sintió pasos en el techo, subió alertado a ver qué pasaba y era una niña de 2 años que apenas balbuceaba algunas palabras.
Daniel Morales, de 38 años, estaba muy tranquilo en su vivienda de calle Jorge Newbery disfrutando de su merecido franco por las tareas que realiza en la Unidad Especial de Patrullaje (UEP) cuando oyó un ruido. Temió por su seguridad y la de su familia y rápidamente salió al patio a ver qué pasaba. Allí encontro, caminando por la medianera, a una pequeña de 2 años que no podía explicarle ni quién era ni cómo había llegado ahí.
"Estaba ahí solita caminando, desorientada, balbuceaba algo pero estaba tranquila. La bajé y la dejé junto a mis hijos que aproximadamente tienen su edad", contó a Los Andes Morales.
El Policía pensó que podrían haber entrado ladrones a alguna casa vecina porque "muchos llevan a los nenes cuando van a robar". Buscó por los alrededores y no halló nada que pudiera ayudarlo a dar con los padres de la criatura.
Mientras tanto, el oficial ya había avisado al 911 de lo que ocurría y personal policial llegó al lugar.
Después de una hora, una mujer que vive en la casa que limita al fondo de la suya (por carril Urquiza) lo vio en el patio con la pequeña y fue a buscar a su hija. "Como la casa de ellos es de dos pisos se le ha escapado, atravesó una medianera corta pero muy alta, de unos 4 metros. Se pudo haber caído, fue muy riesgoso", culminó Morales.